Eliminando estigmas en la salud mental: Consejos y Mitos
El día 10 de octubre celebramos el Día Mundial de la Salud Mental, una fecha y una semana señalada en el calendario para poner en valor y prestar especial atención a un tema que, durante mucho tiempo, se ha mantenido invisible en nuestra sociedad: la salud mental.
Si sois seguidores y/o lectores habituales de Psiconalma conoceréis que tanto en nuestros perfiles como en nuestro blog nos interesa hablar de salud mental. Pero esta semana, con motivo de la celebración de este día creemos que más aún es una oportunidad única para hablar de las percepciones erróneas y los estigmas de la salud mental que, aunque cada vez más visible, debe todavía normalizarse.
Seguramente la salud mental esté más interiorizado en tu día a día de lo que estaba anteriormente, sin embargo, seguro que también existe falta de comprensión y falta de herramientas incluso para apoyar a alguien que lo necesita.
¡Quédate con nosotras y te contamos por qué es esencial romper estos estigmas y cómo podemos contribuir al cambio!
Mitos de la salud mental
Comencemos por desmitificar algunos de los estigmas más comunes relacionados con la salud mental. Seguro que alguna vez has tenido la percepción o incluso has oído que ir a terapia psicológica es sinónimo de debilidad o incluso de locura. Nada más lejos de la realidad, ¡podemos decir que todo lo contrario!
Todas las personas enfrentamos desafíos emocionales en algún momento de nuestras vidas, y eso es lo normal. De hecho, se dice que 1 de cada 4 personas presentará un trastorno de salud de mental a lo largo de su vida.
El hecho de pedir ayuda psicológica o acudir a terapia no significa ser débil, ni estar loco, ni para nada ser una persona peligrosa. Las personas al fin y al cabo estamos compuestas de química, emociones… En definitiva, somos humanos. Por ello, tener herramientas que puedan manejar esas emociones sin que nos sobrepasen y tener el control de nosotros mismos es un acto sin duda de valentía y amor propio.
Existen numerosas sintomatologías que todo el mundo presentará a lo largo de su vida como ansiedad, fobias, depresión debido a situaciones traumáticas, falta de autoestima, acoso, duelos… Son situaciones por las que los seres humanos sufrimos, y al igual que necesitamos una pauta de un médico para ciertos problemas de salud, también necesitamos de profesionales de salud mental que nos orienten y nos ayuden a tomar las herramientas adecuadas para sanar y afrontar estos problemas que todos alguna vez hemos vivido o viviremos en algún momento.
La importancia de la empatía
Debemos destacar también la necesidad de ser empáticos y compasivos con quienes enfrentan problemas de salud mental. La empatía es la clave para derribar los estigmas porque nos permite comprender mejor las experiencias de los demás y brindar apoyo.
Conocer cómo ayudar a nuestro ser querido en momentos complicados por los que sufre es un apoyo indispensable. ¿Cómo podemos empatizar para brindar apoyo y comprensión? Te damos algunas pautas:
- Escucha activa: presta atención a lo que la persona te está contando y muestra interés en lo que está compartiendo.
- No juzgues: evita emitir juicios o críticas. Las personas que están pasando por un momento difícil de salud mental a menudo sienten que están siendo juzgadas, y esto hace que empeore su situación y que no expresen lo que les está ocurriendo.
- Valida sus emociones: reconocer y validar los sentimientos de la persona es súper importante para que la persona sienta que puede permitirse esas sensaciones, además de que se sienta segura de seguir compartiéndolos.
- Pregunta cómo puedes ayudar.
- Respeta los límites: no presiones para obtener información que no están dispuestos a compartir, muéstrate abierto a escuchar cuando esa persona esté preparada.
- Evita el estigma: No uses lenguaje estigmatizante ni hagas comentarios insensibles sobre la salud mental. Evita frases como “supéralo”, “ya deberías estar bien”, “igual estás exagerando y está todo en tu cabeza”…
- Ofrece acompañamiento: A veces, simplemente estar presente y acompañar a la persona en su proceso puede ser reconfortante. No es necesario tener todas las respuestas; a veces, solo se necesita alguien que esté ahí.
- Anima la búsqueda de ayuda profesional: Si crees que la persona podría beneficiarse de la ayuda de un profesional de la salud mental, anímala de manera suave y comprensiva a buscar apoyo. Ofrece ayudarla a encontrar recursos adecuados si es necesario.
La salud mental como parte integral de la salud general
La salud mental forma parte de nuestra salud y bienestar, y merece la misma atención y cuidado que le damos a nuestra salud física. De hecho, están interconectadas en muchos aspectos. El estrés, la depresión y la ansiedad, por ejemplo, pueden tener efectos negativos en el sistema inmunológico, el sistema cardiovascular, neurológico y otros sistemas corporales. La falta de cuidado en nuestra salud mental puede aumentar el riesgo de enfermedades físicas y afecta por lo tanto a nuestra calidad de vida, en la toma de decisiones, en nuestras relaciones sociales, en nuestra productividad…
Atajar e identificar problemas de salud mental puede ayudar incluso a prevenir ciertas enfermedades físicas si se trata con un profesional de la psicología.
Compartir historias personales
Fomentemos el valor de compartir nuestras propias experiencias con la salud mental. Al hablar de forma abierta y honesta sobre cómo nos sentimos mental y emocionalmente, sobre cómo superamos una mala etapa de depresión, sobre qué nos ayuda a afrontar la ansiedad o una fobia… ayudamos a eliminar la vergüenza y el estigma que rodean a la salud mental y convertimos todo este tema en lo que realmente es, un problema normal de nuestra vida diaria al que debemos prestar atención. (Siempre que suponga una conversación fácil de mantener para quien lo comparte).
¿Qué podemos hacer para romper estigmas?
Aquí hay algunas acciones que podemos realizar para contribuir a la eliminación de estos estigmas
- Educar y concienciar: La educación es fundamental para desafiar los estigmas. Aprender sobre los trastornos mentales, sus causas y tratamientos puede ayudarnos a comprender mejor, desmitificar el tema y ayudar en la identificación de problemas mentales futuros. ¿Cómo? A través de los profesionales de la salud mental en sus redes sociales, a través de charlas educativas en centros para contribuir a un mejor clima escolar (violencia, acoso, adicciones, discriminaciones…)…
- Compartir experiencias personales: Cuando sea apropiado y cómodo tal y como hemos comentado, compartir nuestras propias experiencias con la salud mental puede inspirar a otros a hacer lo mismo y a sentirse acompañados.
- Escuchar con empatía: Escuchar activamente y con empatía cuando alguien comparte sus experiencias puede ayudarles a sentirse comprendidos y apoyados. A veces, solo necesitan a alguien que los escuche sin juzgar.
- Evitar el lenguaje estigmatizante: Eliminar el uso de palabras o frases estigmatizantes relacionadas con la salud mental, como por ejemplo evitando etiquetas o términos peyorativos que refuercen esos estigmas.
- Apoyar acciones públicas: Apoyar políticas públicas que promuevan el acceso a la atención de salud mental y la eliminación de barreras para la atención.
- Educar a niños y niñas: Enseñar a los niños desde una edad temprana tanto en sus hogares como en sus centros escolares sobre la importancia de la salud mental, propiciar su autocuidado y normalizar el hecho de acudir a terapia psicológica.
Somos Irene y Elena, psicólogas sanitarias de Psiconalma, nuestro espacio seguro de terapia online. Esperamos haberte ayudado a eliminar ciertos estigmas y desmontar mitos para avanzar en la visibilización de algo tan importante en nuestras vidas como es la salud mental.